Opinión.- Roberto Conde.
Ayer la escena se repitió; miles y miles de vehículos colapsaron la vialidad de nuestro municipio. En algunas calles como: De la Cumbre y Matamoros en la Santísima; o el Tallarín y calle Campesinos, tuvieron una súper carga vehícular que pamó el tránsito por varias horas. Los coches no se movían ni atrás ni adelante.
Es cierto que, parte de las causas de este caos (o estos caos, porque se han repetido prácticamente en cada puente, y casi en cada fin de semana), es la irresponsabilidad de algunos habitantes que estacionan sus vehículos sobre las calles del municipio, algunas por cierto, sumamente reducidas en anchura. Pero, no menos cierto es, que, previendo (o debiendo preveer) el H. Ayuntamiento, debería (porque no lo hace), pensar en un plan de vialidad que urge.
Es responsabilidad y obligación de las autoridades municipales, pensar, organizar y ejecutar un plan de tránsito y efectividad en circulación y vialidad para nuestro pueblo, que se realice, especialemente, en fines de semana y en puentes; porque como sabemos, vemos y sufrimos, Tepoztlán se paraliza durante este tiempo. Pero no lo hace.
Esta es una situación real en el día a día del gobierno tepozteco.
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